sábado, diciembre 19, 2009

El Fénix ha muerto.

En este momento tan fundamental de mi vida, necesito detenerme a mirar el camino que he recorrido y el que aún me queda por recorrer, razón por la cuál estaré ausente por un tiempo -corto espero- de este espacio que tanto quiero. Mi último post será una carta que escribí a mi hijo antes de que naciera y que de seguro servirá como una brujula cada vez que entre al sitio y la lea.




lunes, febrero 19, 2007

Carta a Damián


"La nieve se ha derretido.

El bosque respira nuevamente.

El sol se refleja en el estanque...
Una vez más."


Querido y desconocido hijo mío, desde hace mucho estaba queriendo escribirte algo, pero mi poca dedicación y ese maldito egoísmo que has llegado a sanar me lo impedían. Mira, he estado pensando muchísimo en algo: Si tuviera que enseñarte una sola cosa en este mundo, una sola cosa, ¿cuál sería aquella?.

Instintivamente la respuesta llega a mi cabeza: te enseñaría a ser feliz.

Hijo, la felicidad es algo tan maravilloso como difícil de encontrar en
estos tiempos. Los medios y las marcas te tratarán (a ti y a toda la sociedad) como a un bebé, te dirán que hacer, donde ir, que comer, donde comer, que vestir, que aroma usar y hasta como comportarte para "ser más feliz". Pero quiero que sepas que toda esa mierda vestida de felicidad es falsa. Aunque te digan lo
contrario, el dinero jamás podrá comprar la felicidad, rentarla quizás, pero
jamás comprarla. Por que la felicidad es simple, casi invisible, por eso huele a pasado, por que rara vez nos damos cuenta que está ahí hasta que ya se ha ido.
La felicidad es lo máximo a que un hombre puede aspirar en esta vida.
Pero debes saber que encontrarla no es simple. Un hombre felíz primero debe conocerse a si mismo, debe saber quien es, no como los demás le ven ni tampoco como aspira a ser, un hombre feliz se ve a si mismo sólo como lo que es, más allá de la carne, de su nombre y de sus pasados, para luego y desde esa misma perspectiva reconocer qué le hace feliz.

¿Y tu lo sabes?

En este momento de la vida en el que estamos a punto de conocernos yo lo sé, y compartiré contigo lo que hoy me hace feliz:

Me hace feliz despertar cada día

Me hace feliz caminar de mañana oyendo salsa

Me hace feliz poder mirar a la gente a los ojos

Me hace feliz irme en bicicleta al trabajo

Me hace feliz trabajar en lo que me gusta

Me hace feliz tener una idea

Me hace feliz poder escuchar una idea ajena

Me hace feliz realizar las ideas

Me hace feliz oler la lluvia mientras me moja

Me hace feliz el sonido del viento en los árboles

Me hace feliz entregarme al mar

Me hace feliz conversar con el río

Me hace feliz soñar despierto

Me hace feliz caminar por la calle con mi mujer

Me hace feliz ver la luna llena, y la menguante

Me hace feliz hacer un gol más

Me hace feliz saludar a un desconocido por la calle

Me hace feliz comer fideos blancos

Me hace feliz fumarme una cerveza con mis amigotes

Me hace feliz oír una dulce mentira

Me hace feliz ser un garrero y cantar hasta romper la voz

Me hace feliz dormir como roca

Me hace feliz escribir en una servilleta

Me hace feliz tener un perro

Me hace feliz comer fruta verde sentado en el árbol

Me hace feliz conversar todo un incienso

Me hace feliz aprender algo nuevo

Me hace feliz admirar y creer en las mujeres

Me hace feliz poder orinar en una esquina

Me hace feliz llenar mis paredes de fotos

Me hace feliz sacarme las trancas

Me hace feliz un beso lento lento

Me hace feliz el abrazo de mi madre

Me hace feliz la comprensión de mi padre

Me hace feliz el dulce e imborrable recuerdo de mi abuela

Me hace feliz el silencio de colores

Me hace feliz desdoblarme mientras duermo

Me hace feliz hacer una fogata para tomar desayuno

Me hace feliz seguir mis ideas

Me hace feliz salirme con la mía

Me hace feliz desafiar al poder

Me hace feliz salir de la cárcel

Me hace feliz recordar viejos tiempos

Me hace feliz soñar con un mañana lleno de luz

Me hace feliz haber visto un elefante, un duende y a mi abuela

Me hace feliz sentirme querido

Me hace feliz preguntar y preguntar y preguntar

Me hace feliz no dejar de ser niño

Me hace feliz crecer paso a paso

Me hace feliz andar con una radio encendida dentro de la mochila

Me hace feliz sorprender

Me hace feliz encontrarme un objeto sin valor

Me hace feliz deambular de noche

Me hace feliz un regalo inesperado

Me hace feliz apagar la tv.

Me hace feliz ver a Dios en un orgasmo

Me hace feliz raparme la cabeza

Me hace feliz pintar un muro

Me hace feliz tomar bellas fotografías

Me hace feliz Febrero, Septiembre y el Viernes

Me hace feliz tener mi centimetro cuadrado

Me hace feliz imaginar el fin de la historia

Me hace feliz viajar a lo desconocido

Me hace feliz tener tiempo para hablar de nada

Me hace feliz cantar mientras camino

Me hace feliz enfrentar mis miedos

Me hace feliz la brisa tibia en blanco y negro

Me hace feliz no mentirme

Me hace feliz enseñar

Me hace feliz creer que leerás esto algún día.......

4 comentarios:

Claudia Andrea dijo...

sale el sol.
el fenix resucita de las cenizas.

y cuando vuelves ???
para saberlo

Angel dijo...

supongo que si todas esas cosas nos hacen felices, somos felices y no lo sabemos.

Anónimo dijo...

siempre he tenido claro que la palabra mágica es felicidad (en competencia con "amor").
hace unos años cuando pensaba en buscar un símbolo para unos anillos que nos íbamos a hacer con mi doña llegué a la conclusión que el símbolo debía ser "felicidad"...dando vueltas llegué al simbolismo en tibetano que además es una palabra sagrada...en la que se afirma nuestra vida.
La dicha, la felicidad.


Saludos sureños.

Anónimo dijo...

Hola, ^^ No te conozco, pero bueno, me encantó este post tuyo. Muy inspirador. Simplemente hermoso :'D