jueves, julio 27, 2006

CIEGO SORDO (o Nattan Es una chica)




Hace frío. Voy con la cara pegada al vidrio del metro, que digo metro, debiera llamarse centiMetro, y que digo vidrio, como fui el último en subir al carro quedé con la face pegada al metal de la puerta; y si ya tenía frío, esta wea me cagó.
1,2,3,4,5,6,18,19,22,29,35,39,45 y 46 segundos mas tarde llegamos a salvador. La puerta se abre y salgo expulsado; reingreso, suena el pito, la puerta se cierra y todo comienza nuevamente.
Esta vez mi naríz queda a unos 12 cms del vidrio, lo que es un alivio. Ya no falta el aire y puedo mirar a las personas, a través del vidrio claro, por que ni hablar de darme vuelta -aunque en ocasiones lo hago cuando quiero fastidiar a alguien- hoy no, hoy quiero pensar. El chango -mi diskman- se porta bien y me suelta el mejor tema del disco verde de weezer, excelente, mi ánimo cambia y hasta sonrío. Vamos pensando, vamos creando, vamos moviendo la patita. Pero algo pasa
Mi ki se estremece, algo sucede, me siento mareado, algo va a ocurrir.
Ahí estaba, es decir, me miró a los ojos y me estremecí. No podía creerlo, la imagen que tanto tiempo había imaginado estaba ahí, era real. El ciego sordo paso a mi lado en dirección al fondo del carro, y mientras la puerta se abría pensé en bajarme, lo iba hacer, tenía miedo, me faltaba el aire, quería desmallarme, pero la puerta se cerró y no pude bajar.
Respira bien cobarde, debes enfrentar tu visión, debes saber lo que significa.
Sólo faltaba una estación para mi destino, por lo que decidido al máximo, me desplazo hacia el final. Demonios , dónde está, no lo veo,
dónde está. mmmmmnmnmnnnn,mmmmmnmnmnnn, ese sonido, seguro viene de él, lo miro temeroso a sus indescriptibles ojos, me percibe y lanza ese gutural sonido.
Silencio. Se pone frente a mi y me sonríe.
Abandono el centiMetro con una sensación de alivio. He crecido.



nota: debo arreglar mi cleta.